Desde hace algunos años, afortunadamente el papel del psicólogo está siendo más reconocido en sus diferentes ámbitos de actuación. Concretamente en el área de la salud, el psicólogo puede ejercer como psicooncólogo, es decir, psicólogo especializado en cáncer.
Cada vez es más importante la atención integral al paciente oncológico en todas y cada una de las fases de la enfermedad y en todas ellas es necesaria la figura del psico-oncólogo. El cual estudia y atiende al paciente desde la prevención, detección precoz, diagnóstico, tratamiento, fase de supervivencia, posibles recaídas y cuidados paliativos. Estas fases, se localizan a lo largo de un continuo y cada una de ellas implica una problemática y unas necesidades diferentes, las cuales el psicooncólogo ayuda a afrontar.
Asimismo, desde la psicooncología, no solamente se trata al paciente diagnosticado de cáncer, sino a sus familiares (padres, hijos, hermanos…), los cuales sufren prácticamente al mismo nivel las consecuencias de la enfermedad y son fundamentales en toda la transición que implica un proceso de cáncer.
Finalmente, como toda ciencia, también tiene una parte investigadora, donde se analizan variables que influyen en el paciente oncológico y en su calidad de vida.
Por ello, desde la psicooncología, a través de profesionales especializados y formados, se acompaña, se apoya y se ayuda al paciente enfermo de cáncer y a sus familiares, a lo largo y ancho del proceso de la enfermedad y se colabora en la mejora de la calidad de vida del paciente oncológico.